De la iglesia y la llegada del Papa

Seguramente todo mundo que vive en México y tiene acceso a una tele, radio, o mirar la primera plana de un periódico; lo sabe: el papa ha venido a México. «Nuestro» santo padre, ha llegado a tierras mexicanas. La llegada del Papa a nuestro país, me hizo pensar en algunas cosas acerca de la contradictoria  situación de la iglesia católica. Por principio de cuentas, no sólo creo, sino estoy  convencido que Jesucristo (NSJ), estaría totalmente en contra de la iglesia Católica –o por lo menos en la forma que existe ahora.

1. Comencemos por una de las quejas más frecuentes (y clichés) que se le hacen a la iglesia y al alto clero. ¿Recuerdan que Jesús decía que antes entraba un camello que  un rico entrara al cielo? Los cardenales y arzobispos usando ropas bordadas de oro y  telas de seda no son exactamente la imagen de la pobreza o de la austeridad. De hecho salvo padres que tienen voto de pobreza, cuesta trabajo pensar en un grupo religioso que exude sobriedad. ¡Y qué hablar de las iglesias barrocas! Tienen en sus muros suficiente oro como para hacer que el detector de metales haga implosión.

2. Aunque ustedes no lo crean, NSJ estaba en contra de los rezos masivos, de las misas donde se ora y predica en público. Esto es, la misa tradicional. A los que duden esto, vean Mateo 5:6. Bien dice: los hipócritas que rezan sólo para ser vistos. De hecho dice que la oración debe ser a solas, a puerta cerrada, y encerrado. ¿Imaginan cuál sería el poder de la iglesia si esto se siguiera al pie de la letra? Prácticamente las iglesias deberían desaparecer, y serían únicamente centros de  ayuda o de consejo. La oración y el acercamiento a Dios, en la iglesia, va en contra de lo que dice Jesús. Además menciona abiertamente que el único mediador entre Dios y los hombres es NSJ. Me pregunto entonces ¿cómo es que siendo sólo NSJ el único mediador, la iglesia tiene el poder de salvarte, casarte, excomulgarte o “declararte dentro de la fe?

3. Aunque no lo crean, me sorprende y admiro a Jesús como figura. Es alguien inteligente, sabio y que salía de situaciones muy comprometedoras. Una de las situaciones que más me sorprendió es cuando le  dijeron a quién le pertenecía la moneda  si a Dios o al César. NSJ vio quién la acuñó y dijo. Esto es del César. Al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios. Separó con una bella parábola al estado y al terreno religioso. (Sí, esta pequeña separa los “asuntos de la iglesia” y los “asuntos del gobierno”) díganme cómo correlacionan esto con “el estado del Vaticano  y con una visita de estado. Me cuesta trabajo entender la parábola de NSJ cuando el miembro más prominente de la iglesia hace una visita como otro “gobernante”.

4. Jesús sacó a los  mercaderes del templo prácticamente a base de golpes. Me pregunto qué haría con el banco del vaticano. Que por cierto acaba de entrar a la lista negra de instituciones que posiblemente lava dinero. Y que por cierto es una de las instituciones monetarias más fuertes que hay.

5. Mencionan que no se deben tallar figuras de oro ni ídolos. ¿Esto cuenta  como una figura de ídolos tallada en oro? Que por cierto, también entra con “los mercaderes del templo”. Recordemos que en el santuario hay una tienda religiosa. Ja.

Del verdadero primogénito Divino

Este es un ranteo que tengo desde hace tiempo. Por una lectura que hice de la biblia, noté que ciertas partes hacían ver Jehová tuvo un «hijo» antes que Jesús. Quiero decir que este análisis, aunque no es la versión canónica de la biblia, es sólido y se basa únicamente en partes sacadas directamente de la biblia (Reina Valera, 1960).

Bueno, pues, la afirmación es la siguiente. El primogéntito de Dios no es Jesús, como todo mundo afirma de manera borrega. El verdadero primogénito es Salomón (Lo recordamos por lo sabio que era, el jucio de cortar el niño a la mitad para determinar a la madre  y por la película «Las Minas del Rey Salomón…). Para aquéllos que no sepan cómo se cita en la biblia, primero se menciona el libro  (Génesis, Éxodo, Lucas, etc.), luego el capítulo (generalmente  en la biblia está con un número grande e indicado en la parte superior de la hoja), y finalmente el/los versículo/s (el número del verso del capítulo, indicado en un número pequeño al inicio del renglón)

PRIMERA PRUEBA (dos veces)

Tal como con Jesús, hubo una anunciación divina sobre el nacimiento de Salomón. Es importante notar que no solamente anuncia su nacimiento. Marca que él será su hijo. Veamos 1Crónicas 22:9-10, donde Jehová habla a David. Esto que leeremos es palabra directa de Dios.

22: 9 He aquí te nacerá un hijo, el cual será varón de paz, porque yo le daré paz sobre sus enemgos en derredor y por tanto, su nombre será Salomón, y yo daré paz y reposo sobre Israel en sus dias.
22: 10 Él edificará casa a mi nombre y él me será a mí por hijo y yo le seré por padre; y afirmaré el trono de su reino sobre Israel para siempre.

Si observamos, Jehová, anuncia el nacimiento de Salomón, y dice, de manera literal, que lo tomará por hijo. Esto es repetido una segunda vez:

1Crónicas 28:6 Y me ha dicho: Salomón tu hijo,  él edificará mi casa y mis atrios, porque a éste he escogido por hijo y yo seré a él por padre.

De nuevo Jehová mismo dice a David que tomará a Salomón por hijo. Hace notar, que aunque ha nacido de David y es su hijo físico, lo ha elegido a Salomón como hijo propio, y siendo éste su primer elegido recibe la primogenitura.

En este momento probablemente algunas personas dirán que es imposible que sea su hijo, pues no  es de linaje divino, tal como Jesús, que nació de manera milagrosa y por obra del Espíritu Santo. Pensemos en esto un momento. En épocas antiguas, las adopciones y el tomar a alguien por hijo tenía igual fuerza que un vínculo sanguíneo. Además es el propio Dios, y no un  Angel quien anuncia la llegada de Salomón. No sólamente Dios anuncia su llegada: dice que él mismo hace el vínculo de Padre-Hijo. ¿Si esta es palabra del mismo dios, hay imposibles para él?

Además, veamos 2Crónicas 1:6-7

1:6 Subió, pues, Salomón allá delante de Jehová, al altar de bronce que estaba en el tabernáculo de reunión y ofreció sobre él mil holocaustos.
1:7Y aquélla noche apareció Dios a Salomón y le dijo: Pídeme lo que quieras que yo te dé.

Si bien, esto no es una prueba explícita, me permite hacer una pregunta. ¿Qué clase de relación hay entre Salomón y Jehová que  Jehová le entrega al universo mismo en una charola de plata? Es un acto sin paralelos, jamás en la biblia vuelve a suceder y jamás había sucedido tal cosa. Jehová se le aparece a una persona y, con perdón de sonar a blasfemo, sin menor empacho, actúa como el genio de la lámpara concediéndole un deseo. A nadie le da tal regalo, y cuando Jehová intercede haciendo milagros, es únicamente para mostrar su poderío, para permitir que su pueblo elegido pudiera continuar (o lograr una venganza), o en caso raro, como pago por haber hecho un enorme servicio al señor. Nunca como un regalo de carta abierta. Este regalo no es algo que se le haga normalmente a un desconocido, por muy bienintencionado que sea él. Presentarse sólo para entregar el universo a alguien, sin haberlo pedido, es un regalo que se  da únicamente en relaciones estrechas. Un perfecto ejemplo de relaciones estrechas, es por supuesto, padre e hijo.

De Niños, enfermedades y Curas

No es para nadie una novedad que la iglesia católica se ha enfrentado con una oleada de problemas. Un problema en específico trataré en este post.  El problema se llama PEDOFILIA.

Cuesta trabajo creer que una institución dedicada a la renovación y mantención de la moral y de los valores (y epicentro de todo lo que sea conservador),  sea un nido de  personas con parafilias graves, de patologías sexuales. Pero a pesar de grupos conservadores y otros ultraderechistas  que están dispuestos a negar que esto pasa (o su nueva versión, que esto pasaba pero que ahora ya se ha eliminado de raiz), el problema de los curas pederastas aún existe. Existe a tal grado, que el creador de una rama de la iglesia católica (Los Legionarios de Cristo) se le demostró ser un pedófilo consumado. El caso del cual hablo es del padre Marcial Maciel. Tan grave fue su caso que no sólo abuso de sus feligreses. También  abusó sexualmente de miembros de su propia familia.

Recuerdo haber escuchado por allí una noticia sobre personas abusadas sexualemente por un miembro de la iglesia.  Decidieron hacer  una especie de junta de todos aquéllos que deseaban acusar a un padre (por decirlo de manera irónica un congreso de Violados por el padre Menchaca Menchaquez). La reunión terminó siendo un auditorio lleno de personas abusadas por una sóla persona.

Pero el problema va más allá de de un poblado o un estadio. Las quejas por los abusos sexuales llegan a ser decenas de miles. Ese número, aunque escalofriantemente alto, debe  reconsiderarse, pues no incluye a los que callan el abuso sexual, o a aquéllos que no lo callan, pero no han hecho la queja formal.

Especulaciones aparte, hace varios meses la iglesia defendió a los miembros de su institución alegando que los padres no eran sucios pederastas, sino, más bien personas que eran efebófilos, es decir, una práctica perfectamente NATURAL en donde los religiosos se sentían atraídos por jóvenes adolescentes. Los rangos manejados eran, si bien recuerdo, entre 12 y 17 años.

Este insulto a la inteligencia, por supuesto que no surtió efecto. El intento quedó como un chiste para algunos, y para otros como una afirmación descarada para otros. La afirmación raya en un «ottsss, si no es para tanto».

El problema ha levantado aún más polémica, pues  en estos momentos el santo papa se ha visto obligado a tomar acción por su propia mano. Hacer un mensaje y un escrito para frenar este problema. Esto, aunque no sea de gran ayuda, es una muestra enorme del enorme problema que hay. Pero el problema no se resolverá con una palmadita sagrada en las manos por parte del papa. Si el problema es tan común y tan arraigado, seguramenta algo dentro de la institución, o la fórmula para hacer padres está mal.

Mi mejor suposición sobre la raiz de este problema va hacia un desequilibrio  que se hace al  cesar partes humanas. Hablar de convertir a un hombre sexualmente vivo (aunque no fura activo, que tenga deseos carnales y ese tipo de placer) en un célibe, implica una mutilación de personalidad.  Aunque no soy psicólogo profesional, no me cuesta trabajo pensar que una mutilación a todo un aspecto de vida, deje secuelas indeseables. Imaginen dejar muda a una persona que gozaba hablar, y esperar no tener secuelas. Por supuesto que no. Sin embargo, no puedo hablar de una reforma a una iglesia que tiene una tradición de  cientos de años, pero, mantener a una institución con patología sexual, es peligroso, a lo menos.